Lo mejor para tu salud pasa por acudir de forma frecuente a tu dentista de confianza

Muchos de nosotros seguimos teniendo miedo a ir al dentista de forma recurrente y es que, aunque es cierto que hace unos años estos nos podían provocar cierto dolor, lo cierto es que hoy en día seguimos manteniendo un miedo a algo que ya no es así. Esto quizá se deba a que muchos de nosotros actuamos por recuerdo y en nuestro subconsciente está grabado que hace unos años al acudir a la clínica del dentista lo pasábamos mal, pero esto ya no tiene por que ser así y es que, en la actualidad, tanto las técnicas como los utensilios, como la formación de los profesionales ya poco o nada tiene que ver con lo que era antaño.

Es por todo ello por lo que lo más jóvenes ya apenas les tienen miedo a los dentistas, mientras que los mayores que no dan superado los recuerdos son los que todavía lo pasan mal. Sin embargo, todos los profesionales del sector se están esforzando para que sus clínicas sean lo más amables posibles con los pacientes, así como sus técnicas sean lo menos dolorosas posibles.

Y es que, aunque lo pasemos mal, lo cierto es que lo mejor para nuestra salud pasa por acudir de forma frecuente a nuestro dentista de confianza, ya que así podremos hacer una revisión periódica de las diferentes partes bucales y él nos ayudará a conseguir una boca sana que nos permita disfrutar de ella muchos años. Del mismo modo, llevar a cabo una revisión de forma habitual nos librará, entre otras, de las siguientes enfermedades más comunes:

  • Caries dental. La caries dental es el resultado principal del deterioro dental y una de las infecciones bucales más comunes. Constituye una de las causas de pérdida de dientes y está causada por bacterias como el Streptococcus mutans.
  • Las bacterias responsables de la gingivitis —término médico que hace referencia a la enfermedad periodontal temprana— son diversas y, cuando se instalan en los pliegues de las encías (en la línea gingival y debajo de ella), producen toxinas. Las encías reaccionan a estas toxinas con inflamación e hinchazón, razón por la cual pueden sangrar las encías durante el cepillado dental. Entre el 50 y el 90 % de los adultos presenta gingivitis, afección que, si no se trata, se convierte en periodontitis.
  • Si la gingivitis se extiende por debajo de la línea gingival y afecta al hueso y a los tejidos de soporte, puede convertirse en periodontitis. Se forman bolsas alrededor de los dientes, que dan paso a la inflamación y a la pérdida de hueso. Debido a esta destrucción ósea, pueden perderse los dientes. Entre el 8 y el 10 % de los adultos sufre enfermedad periodontal, la causa más común de pérdida dental. También puede empeorar una afección pulmonar crónica ya presente.
  • Enfermedad de mano, pie y boca. La enfermedad de mano-pie-boca (EMPB) es una de las enfermedades más frecuentes en niños menores de cinco años, generalmente producida por los virus Coxsackie A16 y enterovirus 71, explica la Revista Pediatría Atención Primaria. Tras uno o dos días con dolor de garganta y fiebre, pueden aparecer ampollas algo dolorosas en el interior de las mejillas y en la lengua, así como en las palmas de las manos, las plantas de los pies y los glúteos. Por suerte, la infección suele desaparecer en tres días.
  • La herpangina, relacionada con la enfermedad de mano, pie y boca, infecta con mayor frecuencia a los niños de tres a diez años durante el verano y el otoño. La fiebre, el dolor de garganta y la dificultad para tragar son los primeros síntomas que aparecen, seguidos de pequeñas ampollas en la parte posterior de la boca, que forman grandes úlceras al romperse. Una infección por herpangina suele tardar de tres a cinco días en remitir.

Es por ello por lo que, si vosotros no queréis que todas estas enfermedades se repliquen en vuestro cuerpo, nosotros os recomendamos que os paséis por Íntegra Estética y salud dental, donde un amplio equipo de profesionales os atenderá y asesorará desde el primer día para que tengáis una boca sana y cuidada y así os podáis librar de todos estos problemas tan comunes.

Las aftas, otra de las enfermedades más comunes en la boca

Las aftas son lesiones que se forman en las encías y otros tejidos bucales. Los dentistas las llaman úlceras aftosas y son más frecuentes en niños y adolescentes. La causa de las aftas no está del todo clara, pero el estrés, las hormonas, los problemas inmunitarios, la hipersensibilidad alimentaria y las infecciones relacionadas son posibles desencadenantes. Por lo general, las úlceras sanan en un plazo de 10 a 14 días.