La música es una de las grandes invenciones del ser humano y una de las cosas que nos han permitido diferenciarnos de otras especies. Sin duda, ha formado parte de nuestra vida constituyendo una de las grandes cuestiones ligadas al ocio, puesto que es una de las actividades preferidas de personas de todas las edades y condiciones sociales durante su tiempo libre. Aunque nos gusten diferentes estilos de música a cada uno, lo cierto es que nos une el placer de sentarnos, ponernos los cascos y disfrutar de diferentes canciones. La verdad es que es una de las mejores maneras de sacarle el máximo rédito posible a nuestro tiempo libre.
No nos tenemos que olvidar en ningún momento de que la música son personas. Personas que van generando una idea en su cabeza, que la van ejecutando con los diferentes instrumentos musicales de los que disponen, que la tocan en directo en bares, salas y recintos al aire libre y también que la disfrutan. La música es algo maravilloso y que tiene la capacidad de influir de una u otra manera a los seres humanos. Disfrutarla es el mejor consejo que os podemos dar, tanto si sois de quienes simplemente la disfrutáis como si sois de aquellos o aquellas que, además de eso, la componéis y tocáis en directo.
Ni que decir tiene que, para tener recorrido en el mundo de la música, es clave que nos cuidemos como es debido. Podemos tener un momento de gloria puntual y querer seguir componiendo temas y saliendo a giras tanto por nuestra zona de influencia como en otras muchas. Pero, si no nos cuidamos como deberíamos, ese momento va a ser efímero. Son demasiados ejemplos los que tenemos a las espaldas que así lo atestiguan y no cabe la menor duda de que lo mejor que le puede pasar al mundo de la música es que todas y cada una de las personas que se dedican a él puedan hacerlo durante muchos años más.
Y un buen músico, por cierto, tiene que cuidar de todos los aspectos ligados a la salud, no solo de unos pocos o de los que le generen más problemas. Tenemos que luchar desde los problemas circulatorios, por ejemplo, hasta los dentales. Y es en este último campo donde queremos incidir a lo largo de estos párrafos. Sin duda, una mala salud dental puede tener una influencia muy negativa en una persona que es cantante en una banda… o incluso en aquella persona que toca la guitarra o la batería. La salud dental tiene influencia en cualquier esfuerzo físico que realizan las personas y es evidente que ese esfuerzo caracteriza a cualquier persona que se dedique a tocar encima de un escenario.
No es de extrañar, dada la importancia que tiene la salud dental para los músicos, que muchos de ellos hayan redoblado sus esfuerzos en lo que tiene que ver con el cuidado de su boca. Así nos lo han hecho saber desde Médico Dental SM, una clínica dental situada en Madrid, Úbeda o Baeza, cuyos profesionales aseguran haber tratado a varios de los músicos y cantantes más representativos de nuestro país. Y es que todos ellos son conscientes de que, sin una correcta salud dental, es mucho más complicado realizar su trabajo y tener el éxito del que han venido disponiendo hasta la fecha.
También se trata de una cuestión de estética y estilo, por supuesto. Los cantantes y músicos son personas a las que es habitual que las cámaras de televisión les graben en primer plano durante un concierto. Y, si sus dientes o boca presentan algún problema, es posible que las personas que están viendo ese concierto se den cuenta de ello y que ese frame en concreto se viralice. Eso no es lo idóneo para la conservación de una buena imagen personal, lo cual es igual de importante que la música que están desarrollando y que han venido produciendo a lo largo de toda su carrera. Todos los mánagers de los cantantes y músicos de todo el mundo se encargan personalmente de transmitirle la importancia de este asuntos a las estrellas de la música para las que trabajan.
No nos podemos olvidar de que la sonrisa es la mejor carta de presentación de una persona y que, por tanto, va a ser un elemento muy importante a la hora de que un nuevo cantante o músico se dé a conocer tanto en su país como en otros muchos. En muchas ocasiones, si la apariencia de un músico no nos llama lo suficiente la atención, es posible que ni siquiera consumamos sus canciones. Es injusto que sea así, eso lo sabemos, pero la sociedad es como es y son los propios artistas los que se tienen que ajustar a la realidad existente en cada momento para intentar multiplicar sus opciones de éxito en un negocio que, por cierto, está cada día más atomizado y en el que es más complicado que nunca triunfar.
Vamos a echar un vistazo a la lista de los cantantes españoles que han vendido más discos a lo largo de la Historia. Para ello, accedemos a la noticia que os hemos enlazado en este mismo párrafo y que procede del portal web 65 y más. En la primera posición, podremos ver a Julio Iglesias. Y ahora queremos que veáis cualquiera de las dos fotos que aparecen de él en la publicación. En las dos, deja ver su sonrisa… una sonrisa que es blanca a más no poder y que sin duda hace que su imagen personal sea mucho mejor de lo que podría haber sido de otra manera. En la segunda posición podemos encontrar a Enrique Iglesias, quien, aunque no sale sonriendo en la fotografía que aparece junto a su información, sí que sabemos que tiene una buena salud gracias a los videoclips y conciertos en los que ha sido filmado recientemente.
En la página web del diario El Confidencial, por su parte, se hace una lista de los músicos que son más influyentes en España a día de hoy. En el primer lugar, como seguramente estáis imaginando, aparece una Rosalía que también ha tenido mucho cuidado en cuidar de su sonrisa, así como lo han hecho Quevedo o Bad Gyal. Esto refuerza nuestra hipótesis y la convierte en prácticamente una realidad: la gente de la industria de la música se ha percatado de lo importante que resulta tener una buena imagen física y han depositado en la sonrisa todas sus cartas para intentar llamar la atención de propios y extraños. Y vaya si lo están consiguiendo. Cada vez hay menos dudas al respecto de este asunto.
En la sociedad de la imagen y las redes sociales, la sonrisa es básica
La sonrisa siempre ha sido importante en lo que tiene que ver con el cuidado de la imagen de una persona, pero en estos tiempos lo es más todavía. Teniendo en cuenta el valor que la gente le da a la imagen personal a día de hoy y lo importantes que son las redes sociales en este aspecto, no es de extrañar que haya tantos cantantes y profesionales del mundo de la música que procuren mantener su imagen física (y la de la sonrisa principalmente). A fin de cuentas, gracias a eso también consiguen obtener una gran cantidad de beneficios y abrirse puertas que de otro modo podrían estar cerradas para ellos y ellas. En su situación, también optaríamos por eso mismo con el fin de mantener la popularidad y seguir siendo tendencia.
La situación va a cambiar poco en el futuro próximo. Tiene muy poca pinta de que las redes sociales vayan a ver reducida su importancia y el número de personas que tienen cuenta dentro de ellas con el fin de postear lo que hacen a lo largo de su vida o de constituir su imagen personal. Ya no podemos vivir sin entrar diariamente en una de estas redes y ver qué es lo que están haciendo las personas de nuestro círculo de amistades, además de todos aquellos famosos y famosas a los que sigamos. Las redes sociales tienen un alto componente adictivo que hace que personas de todas las edades, con todos los intereses y de todas las procedencias tengan la necesidad de ir visitando perfiles y actualizando los propios.
Ofrecer una imagen física que sea atractiva es un complemento perfecto para la música que podamos generar como profesionales de este campo. Es una combinación que gusta en todos los estratos de la sociedad y que sin duda es la mejor y mayor puerta hacia el éxito. Son muchos los ejemplos que nos pueden marcar el camino en este sentido. A fin de cuentas, la música forma parte de la sociedad y también hay que proporcionarle a esa sociedad lo que quiere ver (ya no solo escuchar) para granjearnos esa popularidad que va a permitir que cualquier canción que generemos o álbum que editemos se escuche tres veces más de lo que sería escuchado si la gente “únicamente” se sintiera atraída por la música que hacemos.