
Plasencia, una ciudad para el placer de Dios y de los hombres
Plasencia es una hermosa e histórica ciudad extremeña de la provincia de Cáceres. Fue fundada en el año 1186 por el rey Alfonso VIII de Castilla, el cual la ennobleció e imprimió en el plateado escudo otorgado a la misma la voz latina “Ut placeat Deo et hominibus” lo que significa “Para que plazca a Dios y a los hombres”. Geográficamente está enclavada cerca de importantes medios naturales o paisajísticos como el Valle del Jerte, La Vera, Monfragüe o el Valle del Ambroz, lo que la convierte en un enclave privilegiado para realizar una ruta natural.